Un acto de clase. Damir Kreilach, nacido para ser un crack.

A Class Act. Damir Kreilach, Born To Be a Crack.

Ganar es parte de su cultura: Damir Kreilach ha trazado un camino único desde sus raíces croatas hasta llegar a la cima de la Major League Soccer con los Vancouver Whitecaps. Nacido para ser un crack, su camino hacia la cima está marcado por la dedicación, la integridad y una pasión inquebrantable por el éxito.

Copropietario. Inversor. Hombre de familia. Atleta de CVY. Fanático.

Kreilach revela la energía excepcional necesaria para sobresalir como miembro clave de CRKSOLY. Sus contribuciones son invaluables. En los últimos dos años, se ha elevado a sí mismo y a CVY a nuevos niveles, mostrando no solo sus habilidades en el campo, sino también su liderazgo visionario y su compromiso con el crecimiento continuo de nuestra marca. Damir hace una entrada elegante dondequiera que va, y siempre pone a la marca en primer lugar. Ataviado con accesorios y ropa CRKSOLY completos, muestra un estilo inigualable. Encarna sin esfuerzo el espíritu de nuestra marca, la energía de un crack auténtico. La clase es clase, y Damir Kreliach lo es.

Centrocampista ofensivo, con una actitud asertiva ante la vida, está motivado para llevar el éxito a Vancouver y CVY. Siempre dando lo mejor de sí, está comprometido a dar un paso adelante con la marca, mientras marca goles de élite. Cuando alguien encarna una cultura, se puede sentir en su propia esencia; Damir Kreilach personifica la esencia de un verdadero crack.

Más allá de sus logros profesionales, Damir es un ser humano increíble cuyo carácter genuino ha dejado huella en todos los que se han cruzado en su camino. Una personalidad humilde, unida a una personalidad radiante sin igual, es algo que no se puede enseñar. Kreilach nació con una energía única, un hambre indomable que se refleja en su vida cotidiana. Una dedicación inquebrantable a su familia en primer lugar, seguida por su deporte, lo convierten en un modelo inspirador a seguir, que encarna lo que significa representar a CRKSOLY.

CVY trasciende el simple hecho de ser un símbolo o un producto: es una identidad, una cultura próspera y llena de excelencia. Nadie la lleva, la siente y la interpreta mejor que Damir Kreilach.
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